Relatoría especial sobre la pobreza extrema y los derechos humanos, Reporte temático 13 (A/HRC/23/36)
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22. El derecho a la participación está estrechamente vinculado con el empoderamiento, que es un objetivo y principio de derechos humanos fundamental. La participación efectiva puede fomentar la capacidad y la conciencia de los derechos, y permite a las personas que viven en la pobreza considerarse miembros de pleno derecho de la sociedad y agentes autónomos, en lugar de verse sometidos a las decisiones adoptadas por otras personas que las consideran objetos de asistencia o meras estadísticas. Como afirmó un activista peruano, "para nosotros, participar es salir de nuestro aislamiento, romper con nuestro silencio y acabar con nuestro miedo... Antes tenía miedo, hoy soy fuerte, no me humillo"11. También puede brindar a las personas que viven en la pobreza la oportunidad de pronunciarse contra la injusticia, la discriminación y el estigma, y de hacerles frente, puede darles la confianza de tratar con funcionarios del gobierno y lidiar con la burocracia. En realidad, ejercer su derecho a la participación puede ser un trampolín que les lleve a reclamar plenamente otros derechos.