1. Interpretaciones intolerantes de las religiones o las creencias
25. No se puede insistir lo suficiente en que la intolerancia religiosa no procede directamente de las propias religiones, sino que siempre presupone la intervención del ser humano. La idea básica de que no se puede comprender un texto sin interpretación humana también se aplica a las fuentes (escritas u orales)de diversas tradiciones basadas en la religión o las creencias. Aunque puede haber diferencias entre las inclinaciones hacia una mentalidad abierta y tolerancia en diversas tradiciones, hay posibilidades de interpretación en todas ellas. Por tanto, los seres humanos son los responsables en última instancia de hacer interpretaciones con una mentalidad abierta o cerrada, algo que en realidad existe en prácticamente todas las tradiciones religiosas y filosóficas. Si bien algunos creyentes pueden demonizar a cualquiera que profese una opinión ligeramente diferente, otros creyentes del mismo grupo religioso pueden considerar que la diversidad interreligiosa e intrareligiosa es un estimulante necesario para hacer una reflexión teológica o filosófica profunda y una condición previa para intercambios productivos. Algunos pueden soñar con una sociedad homogénea desde el punto de vista religioso como su máxima aspiración política, mientras que otros considerarían que esa homogeneidad sería el final de cualquier creencia auténtica.
26. La conciencia de la importancia de la intervención humana, incluida la interpretación humana de fuentes religiosas, puede contribuir a superar percepciones erróneas "fatalistas" generalizadas. Mientras que en un país los fieles de diversas religiones o cultos han coexistido pacíficamente desde tiempo inmemorial y pueden incluso contraer matrimonio entre ellos con la plena aprobación de sus respectivas comunidades, la relación entre las mismas comunidades en un país vecino podría parecer tremendamente complicada. Además, las situaciones pueden cambiar con el tiempo, ya sea para mejor o peor. Existe una amplia variedad de interacciones amistosas o de odio y relaciones productivas o tensas en diferentes países que atestiguan los efectos que en realidad tienen los seres humanos las personas, las comunidades, las sociedades conformar la coexistencia entre religiones de manera positiva, entre otras cosas mediante interpretaciones con mentalidad abierta de doctrinas religiosas y de las normas religiosas de conducta (véase A/HRC/25/58/Add.1) Una condición previa para superar los malentendidos fatalistas es ser consciente de sus posibles efectos, lo que en última instancia, desalentaría cualquier compromiso en esta esfera.
27. Sin embargo, en algunos países, el gobierno apoya y alienta activamente interpretaciones intolerantes de una religión. Como consecuencia, los gobiernos pueden no proteger adecuadamente a las minorías religiosas de los delitos motivados por prejuicios cometidos por grupos intolerantes, e incluso pueden actuar como guardianes de la pureza de doctrinas religiosas contra los que denomina "infieles", "herejes" y personas que muestran un comportamiento religioso "aberrante". La experiencia general ha sido que, además de violar el derecho universal a la libertad de religión o de creencias, cuando no lo deniegan totalmente, esos regímenes "teocráticos", dondequiera que existan, suelen sofocar cualquier debate intelectual sobre cuestiones religiosas y a menudo crean un clima de intolerancia e hipocresía. Por tanto, no es casualidad que la oposición contra los regímenes teocráticos siempre incluya a creyentes críticos de la misma religión que el gobierno pretende proteger, ya que pueden considerar que esa "tutela" gubernamental simplemente conduce a un conformismo superficial que en realidad disminuye todo el poder de persuasión y el atractivo de su religión.